El SEO negativo era un mito hasta que Google comenzó a sacar a sus “animalitos” a pasear. Antes la lucha se centraba en tener muchos backlinks, en tenerlos de páginas con alto Page Rank, en calzar las palabras clave en el texto (a veces hasta niveles absurdos) etc., etc., etc. Se luchaba por tener más de lo que fuera que Google pedía. Punto. Tienes más de todo: te cuelas delante. Así de simple.
Cierto es que había ciertas acciones que penalizaban (como el texto en transparente tan de moda a principios del 2000), pero eran acciones on-site, te las tenías que hacer tú mismo.
Pero de un tiempo a esta parte, el gran G ha sufrido una seovolucion y se ha dedicado a sacarse de la manga sus actualizaciones del algoritmo, poniéndoles a todas ellas simpáticos nombres de animalitos. Estas actualizaciones, según Matt & cía, son para velar por la calidad de los resultados. ¿Y cómo hacen esto?
- Penalizando los backlinks masivos o de ciertas webs/temáticas.
- Penalizando el contenido copiado (según el concepto de google de contenido copiado, claro. No os engañéis, le da igual quién sea el autor real. Para la gran G es copia todo lo que ya “ha leído” con anterioridad).
Penalizando, penalizando, penalizando. Es lo único que se les ha ocurrido para dotar de “calidad” a su buscador, el castigo.
El caso es que con esta serie de penalizaciones, han puesto en bandeja a los chicos malos una herramienta muy poderosa (y ansiada): el SEO negativo. Gracias a estos cambios, ahora es posible atacar a la web de los competidores. No es ético, pero es real.
Comentarios