El cloaking es un término para referirse a una técnica englobada dentro del Black Hat SEO que consiste en engañar al buscador haciéndole creer que un enlace dirige a una página, cuando en realidad dirige a otra distinta. Al menos, ése era su significado en origen. Actualmente, el cloaking se utiliza no sólo para engañar a los buscadores, sino también para engañar a empresas publicitarias, tales como Facebook Ads o AdWords.
Cloaking: ¿Para qué puede servir?
El cloaking tiene grandes utilidades. Por ejemplo, la mayoría de empresas publicitarias, como las anteriormente mencionadas, no ven con buenos ojos las campañas de CPA o marketing de afiliados, y por esa razón no permiten promocionar anuncios de esa clase. Sin embargo, mediante el cloaking, podríamos crear un anuncio que dirigiera al robot de la empresa publicitaria a una página bien vista por la empresa, pero que al usuario lo enviase a la Landing Page donde está nuestro formulario de conversión.
También puede utilizarse a la hora de comprar un enlace en un sitio web con muchas visitas o a la hora de obtener menciones en grandes fan pages de Facebook o cuentas de Twitter. Los propietarios de esas webs o de esas cuentas, rara vez promocionan aplicaciones virales o campañas de marketing de afiliados. Sin embargo, gracias a estas técnicas, podremos colocar un enlace que, a sus ojos, sea adecuado y, posteriormente, hacer que redireccione a una de esas campañas que, en principio, no nos habría permitido enlazar.
Por supuesto, como todo en el Black Hat SEO, si descubriesen lo que estamos haciendo, muy probablemente, nos cerrasen la cuenta de la empresa publicitaria y se negarían a pagarnos, o nos borrarían el enlace. Sin embargo, si realizamos esta actividad con cautela y con productos y campañas que nos renten una buena cantidad de dinero, podemos sacar un beneficio importante antes de que nos cierren las cuentas.
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